La escuela en catalán, por favor

Cuál es el problema de una escuela que utilice el catalán como lengua vehicular? Quizás esa no es lengua oficial en Catalunya? Qué consecuencias tendría la anulación de la inmersión lingüística en la educación?

Seguidamente intentaré responder de una manera subjetiva a estas y otras preguntas, utilizando el castellano como lengua para este post. He creído utilizar el castellano para que toda la gente pueda entender a la perfección mi posicionamiento, especialmente aquellas personas quienes más me han preguntado por este tema, del cual avanzo que no soy especialista y que deseo que aquellos que saben más que yo me corrijan.

Catalunya es una nación dentro del Reino de España que tiene dos lenguas cooficiales, el catalán y el español, fruto del proceso de anexión de la nación catalana al Reino de España. No obstante, algunas de las competencias han sido transferidas a su gobierno descentralizado, la Generalitat, y a sus organismos competentes, como es el caso de la educación.

Desde los años 80, después de una clara represión de la cultura catalana durante los años de la dictadura (1936-75), en especial de aquellos símbolos identitarios (himnos, banderas, lengua,…), se hizo una política de discriminación positiva para la preservación de la cultura catalana. Esto permitió construir un modelo de inmersión lingüística basado en una escuela catalana para todos, sin segregación por motivos de lengua familiar u origen y donde el catalán es la lengua vehicular para la educación, que se garantiza por una ley a propuesta del pueblo catalán, la LEC (Llei d’Educació de Catalunya).

Acatar las demandas del Reino de España e instaurar el español como lengua vehicular podría tener unos efectos devastadores para la política y cultura catalanas. Primeramente, esto significaría una pérdida de autonomía (o soberanía) política de la nación catalana sobre algunas de las competencias traspasadas, provocando una mayor centralización del poder y una pérdida del homo politicus catalán. Pero no solamente eso, sino que la pérdida de un espacio, como es la educación, de conservación de la lengua catalana, señal inequívoco de toda una cultura y sociedad, puede provocar la minoración de esta lengua y poner en peligro su existencia y la de toda una cultura.

Porqué cuando hablamos de cultura, si bien nos referimos a todos aquellos iconos materiales, sociales y ambientales, también debemos recordar que una gran parte de la cultura es simbólica. Siendo la totalidad de aquellos rasgos distintivos que caracterizan el modo de vida de una sociedad como la catalana, algunos de los cuales están en peligro.

Si bien ha existido siempre un intento de homogeneización en el Reino de España, la llegada del fenómeno globalizador ha puesto en entre dicho aún más aquellas culturas minoradas como es la catalana. Actualmente la influencia de este proceso es muy alta y puede tener como resultado la aniquilación total de muchas culturas.

No obstante, la globalización también puede entenderse como una oportunidad para enriquecimiento a partir de la preservación y potenciación de la diversidad cultural. No podemos jugar al juego de ir a salvar lenguas y culturas en medio de la Amazonía y dejar que nuestro entorno se deteriore. Respetemos y luchemos por todas las culturas, la diversidad cultural es la riqueza de este mundo.

Para la preservación de la cultura catalana, una escuela en catalán.